Compartir

Derecho de autor – Escándalo legal: Druet vs. Cattelan

Derecho de autor – Escándalo legal: Druet vs. Cattelan

Por Camila Sirianni y Olivia Molina.

Frente a la eterna pregunta sobre qué es el arte, hace ya un tiempo largo que ha aparecido una nueva inquietud: ¿Quién es el autor real de una obra, el que la piensa y la encarga o el que la ejecuta y la materializa?

Hace dos meses la comunidad del arte conceptual mundial se vio sacudida por la batalla legal que se ocasionó entre dos artistas: Daniel Druet y Maurizio Cattelan. El escultor francés, Druet, demandó al artista conceptual italiano, Cattelan, y le reclamó los derechos de autor sobre nueve obras escultóricas que realizó por encargo del italiano y para ser usadas en sus instalaciones.

Por un lado, tenemos a Cattelan, el artista que imagina y encarga la escultura, da las instrucciones creativas para su ejecución y, por sobre todas las cosas, crea la idea conceptual que quiere expresar mediante el arte. Por otro lado, está Druet, el escultor que maneja la técnica y materializa esa idea en una escultura. Un dato interesante es que Maurizio Cattelan, ha admitido no saber esculpir, pintar ni modelar, sino ser un artista conceptual. Ahora bien, ¿podría el italiano materializar sus creaciones “conceptuales” sin la intervención del que sabe la técnica? o, ¿podría el francés realizar las esculturas sin las instrucciones de Cattelan?

La demanda de Druet, estimada en unos 4,5 millones de euros, no solo alcanzó a Cattelan, sino a su galerista Emmanuel Perrotin, a la empresa Turenne Editions y al Museo La Monnaie de Paris por, en palabras de Druet, haber ignorado su pedido de ser acreditado como autor por las nueve obras realizadas para Maurizio Cattelan.

La cuestión quedó zanjada en primera instancia por un tribunal parisino y surge así un nuevo precedente para el mundo del arte, en especial, la forma en que es concebido el arte conceptual: Cattelan es el único autor de las obras.

Esta sentencia tuvo fecha el 8 de julio de 2022 y vino acompañada de ciertas afirmaciones. Los jueces establecieron que según el artículo L. 113-1 del Código de Propiedad Intelectual francés, “la autoría pertenece, salvo prueba en contrario, a la persona o personas bajo cuyo nombre se ha divulgado la obra”. Además, explicaron que las obras no son solamente las esculturas de cera, sino que hay una puesta en escena, donde las piezas aparecen colocadas de una forma determinada y trasmiten una idea o mensaje con la idea de jugar con las emociones del público. Todo esto, queda claro, es de una autoría exclusiva de Maurizio Cattelan.

La decisión del 8 de julio del tribunal francés a favor del italiano viene a, por ahora, calmar las aguas en el mundo del arte conceptual (y, tal vez, avivarlas para el resto de los artistas). En general, se tiene del artista una visión de que es él o ella solo/a frente al mundo, que trabaja en solitario y la realidad es que con frecuencia los artistas se apoyan en otros para llevar a cabo sus creaciones. Y esto no quiere decir tener que reconocerle a sus ayudantes la autoría de sus obras.

Los bordes legales en el arte están, aún hoy, un poco borroneados. Los conceptos como originalidad, habilidad, autoría, creatividad, visión del mundo, entre otros, están todo el tiempo siendo analizados. Sin embargo, y por ahora, esta batalla legal fue un “avivar el avispero” con un final feliz para el artista conceptual, y uno no tan feliz para el escultor.

Para más información contactarse con: csirianni@ojambf.com.

Share post: